Si hay una obra literaria que me parece todo un canto a la ensoñación
y a la fantasía es Alicia en el país de las maravillas. Me he leído el libro
unas cuantas veces y soy fan de los
dibujos animados y la película que han llevado el papel a la pantalla, pero
hace unos días me tope con una iniciativa que me ha vuelto a recordar la magia
de esta obra. Se trata del “150 Alice Project”, una iniciativa online que
pretende conmemorar el ciento cincuenta aniversario del libro. Y es que hace ya
un siglo y medio que el matemático, lógico y escritor británico Lewis Carroll
creo al personaje que le iba a dar fama universal. El cuento, aunque de entrada
pueda parecer para niños, está en realidad lleno de alusiones satíricas a los
amigos de su autor, así como a la educación y la política de su época, y usa
constantemente la lógica en su narración, de un modo que ha alcanzado
popularidad no solamente en el ámbito infantil, sino incluso en el matemático.
El 150 Alice Project quiere volver a poner de actualidad a
personajes como el conejo blanco, el sombrerero, la oruga azul, el gato de
Cheshire o la reina de corazones, pero de un modo muy particular: reuniendo a
ciento cincuenta ilustradores de todo el mundo, cada uno de los cuales ha
creado su propia reinterpretación del cuento, para luego crear un libro juntos
que sea la suma de sus obras maestras.
Uno de los objetivos fundamentales de Carroll al crear el
cuento era animar a los niños a sacar su creatividad y su imaginación, y el
proyecto tiene también un objetivo muy claro de mejora de la situación de la
infancia: los beneficios de los libros que se vendan van a ser donados para la educación
de numerosos niños en China y Mongolia.
En la web del proyecto, http://www.150alice.com/,
podéis ver la particular aproximación de cada artista a la figura y los
personajes de Alicia. Las hay de todo tipo: desde escenas donde ella es la única
protagonista, a veces como niña, otras como adolescente, hasta otras en las que
aparece rodeada de los famosos personajes fantásticos que aparecen en el libro.
El conejo blanco, una de las figuras más populares de la obra de Carroll, también
aparece como protagonista en varias escenas. Algunas de las ilustraciones
presentan momentos de tensión, otras de descubrimiento, otras de alegría, pero
todas tienen en común el interés por despertar la fantasía de quienes las ven. En
la mayoría de ellas, además, el color es absoluto protagonista. Si entráis en
la web podréis ver que pinchando en cada uno de los dibujos podréis acceder a
una breve biografía de cada autor y a enlaces a sus trabajos. Y una cosa que me
ha encantado: en cada ilustración se incluye un audio, en inglés, que narra el momento exacto que representa dicha ilustración.
Una autentica maravilla para los sentidos.
La verdad es que todas las ilustraciones son fascinantes,
pero a mí personalmente hay tres que me han cautivado: la de la griega Georgia
Stylou, porque creo que consigue representar a la perfección la inocencia de
Alicia en medio de un mundo que desconoce y al que tiene que enfrentarse; la de
la polaca Dagmara Gaska, por su uso intenso del azul, que como sabéis me
encanta, y la de Angela Takagui, porque me parece llena de fantasía la mezcla
que realiza entre la figura humana de Alicia y la de los animales que la
rodean.
Por cierto, las tres ilustraciones de las que os he hablado
son las que ilustran este post. Espero que a vosotros os gusten tanto como a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario